Hay activistas que critican la postura de organizaciones católicas
Por Mario Rafael León
Al término de la misa dominical, Hipólito Reyes Larios, arzobispo de Xalapa, felicitó de parte de todos los católicos a Andrés Manuel López Obrador y a Cuitláhuac García Jiménez, presidente de México y gobernador de Veracruz electos. “A los dos los felicitamos después de esta competencia muy intensa en el estado y en la que el pueblo a través de los votos ha manifestado su deseo”, dijo.
Ante los feligreses, el arzobispo dio gracias a Dios por la jornada y los triunfos obtenidos y le pidió a Dios ilumine al presidente y gobernador electos, que les dé sabiduría e inteligencia para que en estos momentos difíciles y complicados del país y del estado puedan gobernar con acierto y sabiduría”, dijo.
Durante su homilía, recordó que Jesús llegó a su tierra, el pueblo de Nazaret, donde se había criado, pero que ahí fue rechazado porque la gente no podía aceptar que un similar a ellos de origen humilde y de ninguna fama social fuese el enviado de Dios.
Indicó que de la misma forma hay gente que murmura y critica a los fieles que deciden expresar su amor a Dios y a la Iglesia Católica así como su amor a la vida desde la concepción y a la familia. “Hay activistas que han criticado posturas de organizaciones católicas como Más Vida, Mas Familia, que han promovido en Veracruz iniciativas de ley que buscan blindar el concepto de “familia natural” en la Constitución o que rechazan la despenalización del aborto”, dijo e hizo varios cuestionamientos: “¿Se puede poner un crucifico en un aula? No. ¿Una imagen de la Virgen de Guadalupe? tampoco; si ustedes dicen que son católicos y que están a favor de la vida, de los valores, el respeto, la responsabilidad, la paternidad y maternidad responsables, ¿cómo les va en las redes?”, manifestó.
De igual forma, dijo, Jesús no tiene toda la aceptación y en ocasiones ni entre los propios fieles existe eso, pues nadie es profeta en su tierra.
“Existe una tendencia humana a menospreciar a personas cercanas y conocidas,
como muestra de incredulidad. Todos honran a un profeta, menos a los de su tierra, sus parientes y los de su casa”, señaló y por ello exhortó a los fieles a no cerrar su mente y corazón y por el contrario, darle a las personas la garantía de su confianza y credibilidad.
