La invitación al mandatario de Veneuzuela, Nicolás Maduro, es una muestra de diplomacia por parte del gobierno de transición, independientemente de las posturas en contra, por parte de la derecha y ultra derecha
La fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados, consideró que la presencia en México, del presidente de Venezuela Nicolás Maduro, invitado a la ceremonia de toma de protesta del presidente electo Andrés Manuel López Obrador,es legítima, por tratarse de un mandatario electo constitucionalmente.
Sin embargo, la diputada Mónica Bautista señaló que esto no significa que el partido del Sol Aztecaesté de acuerdo con la política de “mano dura” contra quienes luchan por la libertad de expresión y respeto a los derechos políticos en el territorio venezolano.
Al expresar su postura al respecto, la legisladora indicó que “guste o no guste”, el presidente Maduro no tiene impedimento legal alguno para estar en México.
La diputada secretaria de la Comisión de Relaciones Exteriores en San Lázaro, indicó que la invitación al mandatario venezolano, es una muestra de diplomacia por parte del gobierno de transición, independientemente de las posturas en contra, por parte de la derecha y ultra derecha.
Subrayó que el Estado mexicano debe apegarse a los principios de no intervención y el respeto a la soberanía nacional de los pueblos, por lo que la presencia en México del gobernante referido, debe ser tomada con la diplomacia y el respeto debidos.
Agregó que a consideración del PRD, México debe ser una nación que convoque a la reconciliación entre los pueblos de América Latina, que no puede ni debe avalar políticas de represión o restricción a derechos.
Pidió que en México, los partidos políticos no se presten a “echarle más leña al fuego entre los pueblos latinoamericanos. Queremos un clima de paz y que reine la mesura y armonía entre las sociedades latinoamericanas. Basta ya de intolerancia política“, expresó.
En el caso de la Caravana Migrante, la legisladora subrayó que la problemática de quienes huyen de sus países por violencia y hambre, se encuentran en esa situación debido a la falta de legitimidad de sus gobernantes.
Por esas razones y en un gesto humanitario, el gobierno de México debería dejarlos pasar sin agresiones y con acompañamiento, para evitar mayores conflictos y dar garantía de respeto sus derechos.
Señaló que el perredismo rechaza la actuación de “policía migratoria” de Estados Unidos que que está ejerciendo la autoridad mexicana.
Ese no es el papel que los mexicanos deben jugar frente al mundo, donde la comunidad internacional espera que se muestre el lado humanitario.
Insistió en su llamado la reconciliación entre los países de Centroamérica, y a que los gobiernos de la región generen oportunidades de desarrollo social y económico en sus respectivas naciones, con el fin de dar respuesta a las necesidades de sus pueblos.
Fuente: MVS
