Por: Alejandro García
Xalapa, Ver.- La senadora Indira Rosales San Román se evidenció, pues la supuesta comparecencia del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, no es como ella lo dijo, sino que es parte de una obligación que tienen todos los gobernadores para enviar el documento con su política de seguridad al Senado de la República.
Aunque ella presumió que había conseguido que se aprobara la comparecencia del mandatario veracruzano, ahora admitió que no es así, es decir mintió en sus declaraciones.
Sin embargo, ante el desinterés que ha mostrado el gobernador al llamado unánime, podría solicitársele nuevamente que acuda a dar la información.
Indira Rosales San Román sentenció también que no se trata solamente que se presente el escrito, sino que se aterricen acciones para los veracruzanos, pues se acumulan más de 500 ejecuciones y feminicidios en los primeros cuatro meses de administración.
Además, salió al paso de quienes critican que antes, como integrante de la administración pasada no haya realizado un pronunciamiento al respecto, asegurando que si fuera una preocupación propia o de los panistas, el exhorto no habría salido con unanimidad.
