Se refuerza la teoría de una bala perdida, la PGJ CDMX realiza una intervención a un predio aledaño el cual se ha convertido en un foco rojo
El Instituto Nacional de Ciencias Forenses confirmó que la bala que le quitó la vida a Aideé, alumna del CCH Oriente era de 9 milímetros, el proyectil entró por el tórax, bajó hasta el abdomen y causó lesiones en órganos vitales.
Al momento del disparo, además de Aideé y el profesor de matemáticas, había otros 10 estudiantes en el salón, seis de ellos menores de edad, los cuales ya han rendido su declaración y coincidieron en que afuera del aula había otras 4 personas.
Los alumnos dieron negativo en la prueba de rodizonato para determinar si alguno accionó el arma homicida.
En este sentido se refuerza la teoría de una bala perdida, toda vez que la policía capitalina en coordinación de la UNAM realizarán la intervención de un predio cercano al CCH que se ha convertido en un foco rojo de inseguridad.
Fuente: Adn40.
