Agradece Noé Hernández no ser encasillado en narcoseries
El actor está nominado a los Premios Ariel por Ocho de cada diez; Cuenta la historia de Anne Parèze, una productora de cine porno gay, prisionera del alcohol
El actor mexicano Noé Hernández se dijo agradecido con el director francés Yann González, por haberlo desmarcado de los personajes de sicario, narcotraficante o policía corrupto que comúnmente interpreta en el cine mexicano.
El histrión que ha participado en cintas como El infierno, Sin nombre y Miss Bala aseguró que una de las razones por las que aceptó trabajar en La daga en el corazón fue porque el personaje que interpreta lo aleja del lugar donde lo han encasillado.
Aquí (México) la mayoría de las producciones y proyectos a los que me invitan son exactamente con propuestas de personajes que son sicarios, que son narcotraficantes, policías corruptos, que son el malo, malo y ´requeté malo´ de la historia”, refirió Hernández, quien conoció a Yann cuando éste fue productor de la cinta Tenemos la carne.
Agregó que esta propuesta fílmica le dio la oportunidad de crear un personaje distinto, “algo que para mí es muy significativo porque me ayuda a que los directores vean otras posibilidades más allá de mi apariencia física”.
En la película, en la que comparte créditos con Vanessa Paradis, Kate Moran y Nicolas Maury, entre otros, Noé interpreta a “José”, un actor porno latino de tercera categoría.
De acuerdo con Hernández, cuando Yann vio mi trabajo dijo que quería trabajar conmigo y luego escribió el guión; lo empezó a filmar y me buscó para que trabajáramos juntos. “Estuve filmando siete días en Francia pero estuve casi dos meses en París para familiarizarme con la producción y conocer el tema de la película”, apuntó.
Ambientada en París de los años 70, la película -que se estrenó en la competencia por la Palma de Oro en el 71 Festival Internacional de cine de Cannes- cuenta la historia de Anne Parèze, una productora de cine porno gay, prisionera del alcohol que queda devastada cuando Loïs, su editora y amante la deja.
A la par de esta historia, tiene lugar una oleada de brutales y sangrientos asesinatos donde las víctimas de sus crímenes resultan ser actores de las películas de Parèze.
En La daga en el corazón, Noé Hernández trabaja en cine porno gay, pero su personaje no es parte de las producciones que levanta Anne, sin embargo, dijo:
De haberme propuesto que fuera un personaje homosexual no me hubiera molestado ni mucho menos, ya que Yann aborda el tema con mucha naturalidad y frescura”, dijo el actor.
De hecho, sostuvo que el tema de la preferencia sexual pasa a segundo término porque se trata de una historia de amor pasional.
Aunque no es la primera vez que está nominado en alguna categoría de los Premios Ariel, Noé Hernández considera que es realmente satisfactorio formar parte de una ceremonia que reconoce a los y las protagonistas de la industria cinematográfica nacional.
Yo digo que los premios no te hacen mejor ni peor actor, lo que sí es que son un apapacho al ego. Son de esos apapachos que te impulsan a seguir creando y comprometiéndote a hacer lo mejor posible tu trabajo”, expuso el actor quien está nominado por Ocho de cada diez.
Afortunadamente, añadió, “estoy nominado con una película que considero necesaria y que independientemente de que lo gane o no, esto puede servir para que la película se vea más. Me gustaría que esta nominación sirva para que la producción llegue a más lugares y a más espectadores”.
En esta cinta dirigida por Sergio Umansky, el actor da vida a “Aurelio”, un hombre que tras el asesinato de su hijo une fuerzas para conseguir justicia al lado de “Citlali”, quien a su vez está buscando a toda costa la custodia de su hija.
Noé celebró también la nominación del cortometraje Arcángel, de Ángeles Cruz, con quien recientemente filmó el largometraje Nudo mixteco, en el que se retrata la sexualidad de las mujeres indígenas.
Fuente: Excelsior
