Hipólito Reyes Larios, arzobispo de Xalapa, llamó a los feligreses e integrantes de toda la sociedad a mostrar un corazón compasivo y que cuando se vea al prójimo ante una necesidad exista disposición de ayudarlo.
“Ante tanto sufrimiento y necesidad que se vive en la actualidad, eso es lo que debemos mostrar. Son tiempos de dolor, de gente secuestrada, extorsionada, malherida, tiempos en los que no se sabe qué hacer y ante ello es muy importante que haya generosidad y que las personas se cuiden unas a otras”, dijo.
En su llamado, Hipólito Reyes refirió que es también muy necesario no olvidar la oración porque ella es la llave para que Dios dé la solución a todos los problemas que se padecen.
Ante los feligreses que acudieron a la Catedral de Xalapa, el prelado manifestó que cuando el Demonio se apodera de las personas las destroza y que ello es lo que se advierte en muchos sectores de la sociedad, pues hay gente a la que le gusta la brujería, el espiritismo y que se mete con la Niña Blanca y que después esa gente experimenta situaciones horribles.
“Pero ante todo ello, la iglesia católica, en nombre de Jesucristo, tiene el poder de perdonar los pecados, de sanar y expulsar los demonios a través de los exorcismos, especialmente los exorcismos mayores que se nos han multiplicado porque la gente ya no busca tanto a Dios sino su propia comodidad, su propio beneficio”, dijo.
Durante su homilía, expresó que ahora se vive un mundo muy difícil y lleno de pecado, de maldad, en el que hay mucha gente con sangre fría. “Hay gente de la que uno se pregunta cómo es que tiene sangre fría para asesinar a las personas a mansalva, cómo tiene tanta sangre fría una mamá para asesinar a su propio bebé que tiene en el vientre enarbolando un derecho; ése es el mundo en el que vivimos y que necesita sanación, redención, perdón y eso solamente nos lo da Jesucristo”, aseveró.
El arzobispo de Xalapa invitó a todos los presentes en la misa dominical a mostrarse como buenos samaritanos, como lo hizo Jesús, para evitar que siga habiendo sufrimiento y necesidad.
