Por: Alejandro García
Xalapa, Ver.- El ex tesorero de Javier Duarte de Ochoa, Tarek Abdalá Saad no sólo robó recursos públicos de Veracruz, sino también la inocencia de los niños veracruzanos, pues pagó a una empresa fantasma más de 6.2 millones de pesos por juguetes para ser repartidos con motivo del Día de Reyes, pero tales regalos nunca llegaron.
Tal desvío de recursos lo cometió cuando era director de Administración y Finanzas del DIF Estatal de Veracruz, bajo el mando de Karime Macías Tubilla.
Como en muchos procedimientos de licitación, se convocó a una licitación pública número LS-GEV/22/001/2012, para quienes estuvieran interesados para la adquisición y distribución de juguetes a niños de escasos recursos en el Estado de Veracruz.
Dicha licitación fue ganada por una de las tantas empresas fantasmas creadas durante el duartismo, pues el contrato se le asignó a Balcano SA de CV.
Dicha empresa tiene su domicilio fiscal en la calle Caracol 186, colonia Geovillas, en la zona periférica del puerto de Veracruz. Se trata de una unidad habitacional, donde no existe ni siquiera ese número y mucho menos la citada empresa.
El objetivo de esta licitación, era la de asignar el contrato a una empresa fantasma por cualquier medio, pues participaron 4 proveedores, pero las cuatro se trataban de compañías fachada usadas por la red de Javier Duarte de Ochoa y su esposa Karime Macías para desviar recursos públicos.
En el DIF Estatal de Veracruz, antes de llegar a la Tesorería del Estado, el encargado de avalar los contratos fue Tarek Abdalá Saad, quien confesó ante la Procuraduría General de la República haber llegado a los cargos que ostentó dentro de la función pública, gracias a su amistad con Karime Macías, a quien conoció en el año 2007 en la Ciudad de México.
