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Brasil se acerca a Italia en muertes por coronavirus, pero reabre playas

El gobierno de Brasil ha minimizado el impacto de la pandemia del COVID-19, reabriendo playas, así como comercios


El alcalde de Río de Janeiro permitió que más de 10,000 vendedores ambulantes volvieran a trabajar el jueves y el presidente de Brasil presionó por acciones legales para obligar a los gobiernos locales a reabrir las playas, ya que el número de muertos por coronavirus en el país se acercó rápidamente al de Italia.

América Latina en su conjunto se ha convertido en el epicentro de la pandemia de coronavirus. Si bien algunas otras naciones de la región se han visto más afectadas en términos per cápita, Brasil tiene, con mucho, los casos y muertes más confirmados, con 584 mil 016 casos y 32 mil 548 muertes a partir del miércoles por la noche, con un número de muertes solo por debajo de los Estados Unidos, Gran Bretaña e Italia.

Desde el comienzo de la pandemia, el presidente derechista Jair Bolsonaro ha minimizado el virus, diciendo el martes que la muerte es “el destino de todos”, y que el hambre y el desempleo finalmente serán más mortales.

Entre sus aliados se encuentra el alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, quien también ha presionado para una reapertura en las últimas semanas luego del cierre de los negocios locales para detener la propagación. El martes, la ciudad de casi 7 millones de personas permitió a los cariocas, como se conoce a los residentes, hacer ejercicio al aire libre, mientras que un pequeño subconjunto de tiendas pudo reabrir.

El jueves, Crivella dijo que más de 10,000 vendedores ambulantes podrían volver a trabajar.

“El otro día, un niño me dijo: prefiero morir de coronavirus que ver a mi familia morir de hambre”, dijo Crivella a los periodistas.

Más tarde en el día, durante una sesión de Facebook Live, Bolsonaro alentó al procurador general federal a demandar a los estados para obligarlos a reabrir sus playas.

Toman más en serio la pandemia

Si bien los gobernadores y líderes estatales en otras partes de la región generalmente se han tomado el virus más en serio que Bolsonaro, el hambre creciente y las finanzas públicas inestables están presionando a los líderes de toda América Latina para reabrir el comercio, para disgusto de muchos epidemiólogos.

En Brasil, los funcionarios de salud dicen que hay indicios de que las nuevas hospitalizaciones se están estabilizando, pero las nuevas muertes y los casos confirmados siguen creciendo rápidamente.

El miércoles, el país reportó mil 349 muertes por el coronavirus, su segundo registro diario consecutivo.

Fuente: La Verdad

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