Vacunas de aire

Por: Oswaldo Ceballos

Imagina que vas a la guerra y cuando disparas tu arma no tiene balas porque se te “olvidó” cargarla. Te sentirías muy estúpido ¿No?

Resulta que en México y en varias otras partes del mundo han aplicado la vacuna para la prevención del Covid-19 con jeringa llena de aire lo cual técnica y operativamente debería ser improbable.

Esas personas que realizan este tipo de negligencia ¿Qué procedimiento ocupan para colocar la vacuna en los ciudadanos? Esta pregunta la hago bajo el precepto y concediendo la excusa sobre que se trató de “un error”.

No mamen.

Realmente no creo que se trate de un error, ¡¿A quién carajos de le olvida poner el líquido en la jeringa?!

Quizá sea algo mucho peor, y es que sea a propósito el aplicar aire… Entonces ¿Qué pasa con la vacuna real?

¿La venden?

¿La guardan y la aplican a sus amigos o familiares?

Mi abuela siempre me ha dicho: “Piensa mal y acertaras”.

Pero también pienso en qué mente retorcida se da la idea de aplicar aire a una persona quien acudió a la campaña con la ilusión de estar más fuerte para encarar la pandemia.

Esos quienes realizan esto a propósito, son unos desgraciados, malditos y no tienen un puto gramo de vergüenza ya ni digamos profesional sino humano.

Veamos el ejemplo de Sonora, donde una mujer de 95 años es engañada por un tipejo quien aplicó aire en lugar de lo que por derecho le correspondía a la señora.

Las autoridades confirmaron que efectivamente eso pasó, luego informaron que había sido un error humano que por el cansancio se equivocó… en serio, o nos quieren ver la cara de pendejos o piensan que somos pendejos.

En primer lugar, por supuesto que hay personal médico y de enfermería que trabaja de forma extenuante y es de admirar su empeño y dedicación.

Peeeeero… de ahí a no darse cuenta que traes una jeringa vacía es mucho tramo.

Y esto fue detectado porque lo grabaron para luego difundirse en redes sociales, si no se hubiere captado en video no nos damos cuenta del hecho y la señora de 95 años se habría ido a casa sin su vacuna creyendo que sí se la aplicó tan amable muchachito que le decía: “Va a ser un piquetito, ¿ok?, ahí va…. permiso, uno, dos y listo”.

Hay quienes dicen que se trata de una simulación para chingar al gobierno porque es temporada electoral. Conociendo cómo se las gastan muchos no suena tan loca la maroma, pero el problema aquí es que el mismo delegado del gobierno federal en Sonora, Jorge Taddei reconoció que sí pasó. He ahí el meollo del asunto.

¿Entonces ese muchachito pendejo que aplicó aire a cuántos más se los hizo?

Otro caso es en el Estado de México donde unas nietas grabaron cuando vacunaban a su abuela y se dieron cuenta que no tenía nada la jeringa.

Se observa cuando la enfermera tiene en una mano la jeringa y en la otra mano algodón con alcohol para desinfectar el brazo de la señora, quita el tapón de la jeringa, pero nunca el frasco de la vacuna, aun así inyecta a la mujer… le inyecta aire.

Aquí no hay colores partidistas, todos podemos ser afectados creas o no en el gobierno actual, y el reclamo es que haya más atención en la vacunación por parte del personal que atiende y de la ciudadanía en general que esté atenta siempre.

Si aún no te vacunas y estás por hacerlo, fíjate bien que todo vaya en orden. La enorme mayoría de los trabajadores de la salud hacen bien su trabajo y tienen vocación de servicio.

El problema es que, por unos pocos, pagan todos, lamentablemente.

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