Senadores aceptaron la reforma con 114 votos, ahora le toca a Diputados revisarla
Los golpes y castigos severos con maltrato aplicado por los padres de familia a sus hijos se encuentra en la mira de los legisladores, por el momento el Senado de la República ya aprobó una reforma para cambiar esta situación de la que menores de edad son víctimas del maltrato.
Cabe señalar que la UNICEF señala que 6 de cada 10 menores de 1 a 14 años de edad han experimentado algún tipo de violencia como castigo “reformativo” o disciplinario. Además agrega que 1 de cada 15 menores de edad, han recibido un castigo severo como jalón de orejas, cachetadas, manotazos o golpes.
Estos actos disciplinarios o de corrección en realidad solo perjudican al menor, ya que además del daño físico, impacta en su desarrollo.
La aprobación a la reforma que busca prohibir los castigos corporales como método de corrección se dio con unanimidad, 114 votos de los senadores.
Así, el artículo 44 de la constitución se le añadió un párrafo donde se estipula: “Queda prohibido el uso del castigo corporal en todos los ámbitos, como método correctivo o disciplinario a niñas, niños y adolescentes”.
Además de los padres, “quienes ejerzan la patria protestada, tutela o guardia y custodia” de los menores de edad tiene la obliación de garantizarle dentro de sus “posibilidades y medios económicos, las condiciones suficientes para su sano desarrollo”.
Ahora es el turno de la Cámara de Diputados de revisar las modificaciones realizadas, que fueron propuestas por la senadora de Morena Nestora Salgado.
Expertos señalan que la disciplina agresiva aumenta las probabilidades de que el menor de edad desarrolle comportamiento agresivo hacia otras personas, sean niños o adultos.
La panista Josefina Vázquez Mota, presidenta de la Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia, refrendó el apoyo a la iniciativa morenista, la cual evitará que castigos lleguen a afectar a menores con lesiones o incluso la muerte (en los casos más graves de agresiones a menores).
Vázquez Mota señaló con cifras del Inegi, que entre los años 2012 y 2017 al menos 2600 menores de 15 años fueron asesinados, siendo el 42% de estos casos un familiar el responsable.
Fuente: Debate
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