El matrimonio no puede ser usado como un instrumento igualador, es una aberración
Por: Raymundo León
La defensa que las familias veracruzanas han hecho durante los foros simulados y en las manifestaciones como la del pasado 30 de enero es para defender las instituciones familiares que el orden natural ofrece y que permiten la perpetuidad de la especie humana, no contra las personas que tienen una orientación sexual hacia personas de su mismo sexo, afirma la Arquidiócesis de Xalapa.
“Respetamos a las personas con este tipo de orientación, como todos los seres humanos tienen una dignidad y merecen todo nuestro respeto. Con el pretexto de la inclusión no se pueden desmantelar las instituciones familiares; eso es una perversión”, refiere el comunicado de este domingo.
La modificación al Código Civil con yerros, en los que se sustituye al matrimonio entre un hombre y una mujer, afirma la Arquidiócesis, abriría la puerta a la adopción de niños por personas del mismo sexo, al derecho a las técnicas de reproducción que implican una serie de dilemas éticos, a la compra-venta de seres humanos, a la renta de vientres o maternidad subrogada y a la homosexualización de los niños.
“Si se modifica esta figura para permitir las uniones homosexuales, sólo se regulará la relación de pareja y no se protegerá a los más vulnerables de la familia. El matrimonio no puede ser usado como un instrumento igualador. Esa es una aberración”.
El documento firmado por José Manuel Suazo Reyes, director de la Oficina de Comunicación Social de la Arquidiócesis de Xalapa, felicita a los cuatro diputados que salieron del Palacio Legislativo a saludar a los manifestantes que permanecían afuera y que también fijaron su postura en contra de esta reforma ideológica que atenta contra la familia.
Las familias veracruzanas, se lee en el documento, necesitan resolver la gran deuda social (inseguridad, servicios de salud, infraestructura carretera, oportunidades de trabajo, mejores precios a los productos del campo, educación…) no que las destruyan y por ello se espera que el Congreso proteja el matrimonio y a la familia natural.
La Arquidiócesis reitera que el matrimonio es una institución natural milenaria que da origen a la familia, que es entre un hombre y una mujer y que de esa relación surgen los hijos, razón por la cual el matrimonio es la base de la familia y de ella surge la sociedad.
“Nos sorprende que con el pretexto de ‘la no discriminación’ y de una falsa inclusión, se busque poner al mismo nivel la grandeza y dignidad del matrimonio con una relación socio asistencial y o sexual. El matrimonio goza de una naturaleza propia, tiene sus fines específicos y propiedades esenciales. La reforma del Código Civil de Veracruz, busca cambiar la naturaleza jurídica del matrimonio”, refiere.
Recuerda que el matrimonio entre hombre y mujer regula y protege a la familia, mujeres y niños y que esta protección cada día es menor debido al debilitamiento que sufren las familias con leyes adversas. “Si se modifica esta figura para permitir las uniones homosexuales, sólo se regulará la relación de pareja y no se protegerá a los más vulnerables de la familia. El matrimonio no puede ser usado como un instrumento igualador. Esa es una aberración”.
