Día 27. Abril 16 de 2020
Por: Raymundo León
Todos esperaban el anuncio de la fase 3. En cambio, hubo una especie de válvula de escape: el anuncio de que todo podría ir regresando a la normalidad desde el 17 de mayo, aunque es claro que no habrá normalidad.
En el país el registro de muertes es de 449 muertos, hay cinco mil 847 casos confirmados y 11 mil 717 sospechosos.
El panorama para Veracruz no es bueno: hay seis defunciones, 106 casos confirmados y 519 casos sospechosos.
Ayer miércoles se registró el sexto deceso, cinco de los cuales eran pacientes mayores de 50 años (defunciones en Tlacotalpan, Emiliano Zapata, Poza Rica, Alvarado, Coatzacoalcos y Veracruz).
Los casos positivos siguen en aumento, la transmisión comunitaria actualmente es del 74.5% con tendencia al alza; situación que también se refleja en la incidencia de casos nuevos, que en el estado hace unos días era de 0.48 y ahora es de 1.24 por cada 100 mil habitantes.
El anuncio hecho por la mañana por el gobierno federal da la impresión de que en por lo menos 900 municipios del país, la población ha hecho bien las cosas, ha seguido las indicaciones de las autoridades y por ello podrían reiniciar sus actividades a partir del día 17 de mayo. Es un aliciente para que otros hagan lo mismo.
Pero no hay que relajar las medidas de sana distancia y continuar cuidando a los adultos mayores, a las personas con enfermedades crónicas y mujeres embarazadas.
Tampoco hay que prestarle atención a fotografías o notas de cadáveres falsos o toques de queda, ello también enferma.
El sacrificio es de todos, como en otras épocas se han sacrificado antepasados, bisabuelos, para que el país salga adelante.
Algún día, los niños de hoy contarán el sacrificio hecho por sus padres para superar esta pandemia
